Château Pédesclaux: una joya escondida por descubrir

La semana pasada, tuvimos el inmenso placer de visitar el Château Pédesclaux, una auténtica joya enclavada entre Saint-Estèphe y Pauillac. Para apreciar plenamente el esplendor de la combinación de cristal moderno y piedra tradicional de Burdeos, hay que vivirlo en primera persona. Los salones son magníficos y la vista del río, impresionante. ¡Quedamos tan cautivados por la belleza del lugar que olvidamos tomar fotos!

Château Pédesclaux en Pauillac, Grand Cru Classé del Médoc, un edificio moderno con fachadas de cristal y una sección central de piedra, rodeado de viñedos verdes bajo un cielo azul, en la región vinícola de Burdeos.

La bodega Château Pédesclaux representa una proeza arquitectónica y tecnológica. Creada en colaboración con el arquitecto Jean-Michel Wilmotte, preserva los aromas de la uva gracias a un sistema de ascensores totalmente accionado por gravedad, similar al de Cos d'Estournel y Lynch Bages.

La combinación de cubas de acero ultramodernas con piedra, madera y vidrio ofrece una experiencia cautivadora; la bodega de Pédesclaux es una de las más hermosas que hemos visitado.

El arte está presente en todas partes en el Château Pédesclaux: desde las pinturas en las salas del castillo hasta las esculturas en el parque y la bodega.

Estamos encantados con este descubrimiento que concluyó con un almuerzo en el parque del Château Lilian Ladouys disfrutando de los filetes de la carnicería Pigout en Saint-Estèphe.

El Château Pédesclaux, grand cru classé en 1855, figura hoy entre los vinos imprescindibles recomendados por el Château Papounan.